Domir en una antigua cárcel es posible. Actualmente, varios hoteles reformados ocupan estos edificios que todavía conservan su ambiente «presidiario». Las celdas, la decoración espartana, la organización del espacio… Muchas de sus características principales se conservan a la par que se han añadido todos los lujos necesarios para pasar una noche estupenda. Es, sin duda, una experiencia única. He aquí una selección de hoteles con este lúgubre pasado:
HET ARRESTHUIS
En la ciudad holandesa de Roermond está el hotel Her Arresthuis (enlace aquí). Se trata de una antigua prisión que se ha convertido en un hotel de diseño. Sus 105 celdas son ahora 36 amplias habitaciones y suites. Sin embargo, en todas ellas quedan recuerdos del pasado carcelario del lugar. De hecho, este edificio aparece en la lista de monumentos nacionales de Holanda y conserva elementos antiguos como las escaleras de hierro fundido, las puertas de las celdas y las rejas de las ventanas intactas.
El propio nombre del hotel significa literalmente ‘la casa de los arrestos‘. En concreto, la cárcel se inauguró en 1863 y cerró en el año 2007. Por eso hoy, además de pan y agua, aquí se pueden saborear deliciosos manjares en su restaurante y disfrutar de sus interesantes exposiciones de arte.
BEST WESTERN PREMIER HOTEL KATAJANOKKA
En la capital de Finlandia encontramos otra cárcel convertida en hotel. Se trata del Best Western Premier Hotel Katajanokka (enlace aquí). La prisión de 1837 se sitúa en una isla, la de Katajonokka, ubicada en el centro de Helsinki. Además, dispone de un restaurante muy famoso.
En general, sus habitaciones, que mantienen un aire carcelario, presentan colores cálidos. Durante los fines de semana por la mañana, se accede gratuitamente a la sauna. También hay un buen gimnasio.
El restaurante del hotel, el Jailbird, sirve una gran variedad de platos típicos en una sala con barrotes y paredes de ladrillo. Si necesitamos aire fresco, dispone de una terraza junto al parque Linnanpuisto. Es el lugar ideal para tomar el café por la tarde o los cócteles de verano.
MALMAISON OXFORD
Este hotel, situado en Oxford (Reino Unido), todavía conserva la imagen de su pasado carcelario, cuando era una prisión victoriana. Hoy es un impresionante hotel-boutique (enlace aquí). De media, el precio de una noche en la habitación doble estándar cuesta más de 300 euros.
Sus habitaciones son elegantes y su arquitectura, muy original. Se trata de un castillo medieval restaurado que, además, cuenta con un magnífico restaurante.
En definitiva, este hotel ofrece una noche en una celda de lujo: con ducha de alta presión, iluminación ambiental y televisión vía satélite.