Unas vacaciones en una isla griega es la fantasía de millones de personas. En este post te hablaré sobre la isla de Creta que aunque no es de las más publicitadas, sí es la más grande de este pequeño país mediterráneo. Ofrece sin lugar a dudas todas las opciones imaginables para pasar unas vacaciones en familia.
Isla de Creta
Grande también en la historia, en Creta nació la civilización más antigua de Europa, la enigmática cultura minoica, hace más de 4000 años.
Como llegar a la Isla de Creta
- A Creta por mar o tierra
Para llegar a esta isla con más de 8 mil Km cuadrados de superficie, se puede tomar un ferry desde el puerto ateniense de El Pireo. Todos parten de noche y el viaje dura unas nueve horas (ANEK Lines). Sin embargo también hay ferries de alta velocidad (Knossos Palace o Festos Palace) que hacen el trayecto en seis horas. Según se escoja, se llega a las ciudades de La Canea (Chania), Rétino (Rethymnon) o Heraclión (Heraklio) muy temprano en la mañana, a las 5:30 ó 6:30 am.
- El avión también es una opción si se quiere ganar tiempo. Desde el aeropuerto Eleftherios Venizelos de Atenas parten diariamente varios vuelos, aerolíneas griegas como Aegean Airlines u Olympic Airways ofrecen buenas promociones.
Lo mejor para grupos familiares con niños es hospedarse en las ciudades de Heraclion (la capital de Creta), Chania o Rethymnon, ya que ofrecen buenos alojamientos todo incluido. También ofrecen atractivas opciones de entretenimiento en cada ciudad, y la posibilidad de moverse hacia cualquier punto de la isla con facilidad, ya sea en transporte público o alquilando un automóvil.
Si la familia viaja con la mascota, para evitar contratiempos es bueno confirmar antes con el hotel vía telefónica o por e-mail, ya que aunque algunos lo permiten, casi ninguno lo especifica en su página web u ofertas promocionales.
Qué visitar en Creta
Con infinitas posibilidades para hacer un poco de todo, el problema que tendrán los visitantes de esta isla es escoger qué van a dejar fuera de su itinerario, ya sea por falta de tiempo o presupuesto.
Hay lugares imperdibles que deben incluirse y por lo menos hay que dedicarle una semana a Creta. No se debe dejar de visitar la joya arqueológica del mundo antiguo mediterráneo:
- el palacio de Cnosos;
- la ciudad capital de Heraclion, junto a su Museo Arqueológico;
- la antigua capital de la isla, Chania, con bellísimas edificaciones y animada vida diurna y nocturna;
- Réthymnon, no menos bella, con castillos, mezquitas turcas y casas venecianas.
Playas
- Playa Elafonísi,
- Playa Vai,
- Playa Preveli,
- Playa Falassarna,
- Playa Stavros,
- y la península de Gramvousa.
Conociendo un poco de historia cretense
Una de las ventajas de visitar yacimientos arqueológicos es que dan la oportunidad de imaginar cómo sería la vida dentro de una cultura y época determinada. Algo que por ejemplo para los niños es muy emocionante porque les acerca la historia que ven en los libros volviéndola más real.
Por eso, estar en el palacio de Cnosos será sin duda una experiencia increíble. En esta edificación vivió el rey Minos, quien mandó a Dédalo a construir el laberinto para encerrar en él al Minotauro, el monstruo que se alimentaba de humanos que se llevaban en sacrificio para saciarlo.
En este yacimiento descubierto por el británico Sir Arthur Evans, se puede observar su núcleo con el patio central conocida como Piano nobile (salón amplio), el famoso fresco de los delfines, los almacenes con enormes vasijas de barro utilizadas para almacenar provisiones, el salón del trono, el corredor del propileo norte con el fresco de un toro, la sala de las Dobles Hachas, entre otros espacios.
Ciudades, montañas y playas
Heraclion
En la ciudad de Heraclion hay que visitar el Museo Arqueológico, uno de los mejores de Grecia, con objetos de Knossos y otras ciudades del imperio minoico, además de piezas griegas y romanas.
La ciudad capital es además ideal para pasear por lugares como la gran fortaleza medieval que la protege, el puerto, el mercado donde se pueden adquirir gran variedad de productos o las calles del centro, con bellas plazas como Platía Venizelou y muchos sitios para comer.
Chania
Pero Chania le gana en belleza a la capital por su puerto rodeado de edificios venecianos, un ritmo más pausado, bellos callejones que albergan restaurantes, tiendas de artesanías, joyas, ropa y bonitas posadas. Además de la fortaleza de Firkas, el Museo Arqueológico, el mercado municipal, el faro situado al final de la muralla veneciana del puerto, la mezquita de los Jenízaros que data del siglo XVII y las playas de Oasis y Kalamáki.
Esta ciudad también es la mejor opción para ir de compras. En la calle Jalidón y el puerto se consiguen bellas joyas y ropa y la calle Skridlof posee una gran cantidad de objetos de cuero como botas, carteras, sandalias, etc. La vida nocturna también es más animada en Janiá, con tabernas familiares por doquier y música en vivo y algunos clubes.
Rétino
Tampoco hay que perderse Rethymnon, la tercera ciudad de Creta con un bellísimo casco histórico al cual se entra por Porta Guora, el único resto que queda de la muralla veneciana y que une la parte vieja con la parte moderna de la ciudad.
En Rethymnon hay una gran fortaleza levantada en 1573, la mezquita Neratze y un interesantísimo Museo Histórico y Popular, donde se pueden ver algunos vestigios de la antigua forma de vida de la gente. Hay hermosos tapices, bordados, cerámica tradicional, joyas de plata y ámbar e instrumentos musicales.
La playa urbana de Réthimnon también es una buena opción para relajarse o sentarse en un café, tomar algo refrescante y comprarle helados a los niños.
Las atracciones naturales de Creta
Si se habla de montaña, la excursión más popular es atravesar la Garganta de Samaria entre las Montañas Blancas, uno de los lugares más bonitos de Creta. Es la Garganta más larga de Europa, su recorrido llega a 16 km.
Si se comienza bien temprano en la mañana, al mediodía se estará llegando a la población de Agía Ruméli, con una agradable playa para descansar de la caminata. El regreso se hace tomando un barco hasta el punto donde se puede tomar el transporte de regreso a la ciudad.
Y por supuesto no se puede dejar Creta sin visitar sus playas. Elafonísi es quizás la más exótica por su aire tropical de arenas blancas y aguas cristalinas, además es ideal para los niños porque no es onda y tampoco tiene olas. Desde Janiá el viaje dura poco menos de una hora.
Otro exótico paisaje se encuentra en el este de la isla en la playa de Vai, rodeada de un bosque de palmeras datileras, de los pocos que existen en Europa, no se sabe quién las plantó.
Vale la pena sumergirse en las aguas de Prevéli, donde el río Kurtaliótis hace su entrada al mar rodeado de palmeras datileras y bambú, un privilegiado paisaje junto al intenso azul del mar.
El cine también dejó su huella en Creta, ya que en la playa de Stavrós se filmó la famosa película Zorba el griego (1964), protagonizada por Anthony Quinn.
Para finalizar, bueno sería cruzar hacia la península de Gramvousa, bastante aislada y dueña de una de las playas más bonitas de Creta.